¿Pido el certificado energético después de una reforma?
El certificado energético es un documento obligatorio para cualquier vivienda que se ponga a la venta o alquiler en España. Proporciona información sobre la eficiencia energética del inmueble. Sin embargo, surge la duda común de si es necesario solicitar este certificado después de llevar a cabo una reforma en la vivienda.
La respuesta es Sí, pero debes pedirlo antes de hacer la reforma
Sí, sí, antes.
Si vas a invertir en tu hogar el dinero que cuesta hoy en día realizar la reforma integral de un inmueble, lo suyo es antes de contratar al constructor o reformista es contratar un aparejador que te haga un estudio de la reforma que quieres hacer.
Un aparejador o arquitecto técnico profesional te aconsejara no solo sobre interiorismo sino también sobre como realizar la reforma para generar un mayor confort y un ahorro de energía (y por consiguiente de dinero).
En esa memoria técnica valorada se incluirá un certificado energético del estado actual (punto de partida) y otro certificado energético del estado reformado (lo que vamos a proyectar).
Y con esos datos observaremos cual es la mejora en eficiencia energética que la reforma proporciona a tu hogar; Y podremos rediseñar la reforma en caso de que nos interese lograr una mayor eficiencia energética.
Una vez terminada la reforma, se realizará un tercer certificado energético de obra terminada, que corregirá al de estado proyectado en caso de que durante la obra se hayan producido cambios en dimensiones o en materiales.
Y este último es el que vale.
Piensa que una reforma integral de un piso hoy en día rondará los 50.000 o 60.000 €. Y el estudio y asesoramiento de un aparejador unos 500. A poco que el profesional logre reducir un 10% el presupuesto de la reforma, jugando con sustituir unos materiales de acabado por otros más económicos o colocando aislante donde se necesita. Van a ser los 500 € mejor gastados de su vida.
¿Pero en todos los casos se necesita?
La respuesta a esta pregunta depende de la magnitud de la reforma realizada y de las normativas específicas de cada país. En general, si la reforma ha afectado significativamente a la eficiencia energética de la vivienda, es recomendable obtener un nuevo certificado energético. Este documento proporcionará una evaluación actualizada de la eficiencia energética de la vivienda, teniendo en cuenta las modificaciones realizadas durante la reforma.
Las reformas que suelen requerir un nuevo certificado energético son aquellas que afectan a elementos clave como el aislamiento térmico, la calefacción, la refrigeración, la iluminación y otros sistemas energéticos. Por ejemplo, si se ha instalado un nuevo sistema de climatización más eficiente, se han mejorado las ventanas para un mejor aislamiento o se ha modificado la distribución de los espacios, estas acciones pueden tener un impacto significativo en la eficiencia energética de la vivienda.
¿Es obligatorio?
La obtención del certificado energético después de una reforma no solo es una cuestión normativa, sino que también puede ser beneficiosa para el propietario. Un certificado energético favorable puede aumentar el valor de la propiedad y hacerla más atractiva para posibles compradores o inquilinos preocupados por la eficiencia energética.
Es importante tener en cuenta que las normativas específicas pueden variar, por lo que es recomendable consultar con un profesional del sector inmobiliario o energético para obtener orientación personalizada. En cualquier caso, contar con un certificado energético actualizado proporcionará información precisa y transparente sobre el rendimiento energético de la vivienda, beneficiando tanto al propietario como a los futuros ocupantes.